Taylor_Modelo de ocupacion humana_6d
4
Parte I Teoría del MOHO
disponibles en más de 20 idiomas. Sin embargo, lo más relevante , sin embargo, es que los miembros de la pro fesión de terapia ocupacional en todo el mundo están realizando contribuciones significativas al desarrollo del modelo, de tal manera que sus conceptos y aplicacio nes reflejan de forma creciente múltiples perspectivas. El MOHO se está enseñando y aplicando cada vez más en contextos en línea y de telesalud en todo el mundo, lo que lo hace más accesible para las personas que no pueden salir de sus casas y para aquellas en contextos remotos y rurales (Lin y Fisher, 2020). Las ofertas de paquetes con instrumentos de evaluación y tratamiento basados en lenguaje HTML en el sitio MOHO-IRM Web ( v. El MOHO-IRM Web [https:// moho-irm.uic.edu/]) permiten la integración fluida de las herramientas del modelo en la práctica de la telesa lud. En la última década, los instrumentos de evaluación del MOHO también se han incorporado progresiva mente en los sistemas de historias clínicas electróni- cas en numerosas ramas del Servicio Nacional de Sa lud en el Reino Unido y en muchos otros lugares del mundo. Estos avances tecnológicos no representan úni- camente un nuevo modo de aplicar el MOHO, sino que también abren nuevas posibilidades para su avance y expansión en regiones donde aún no ha llegado. Orientado a la práctica Todos los días, el MOHO se utiliza ampliamente en hospitales, clínicas, centros de atención domiciliaria, centros de enfermería especializada, centros comu nitarios, escuelas y muchos otros escenarios en todo el mundo. Cuando los terapeutas utilizan los concep- tos del MOHO, deben relacionarlos con la persona o grupo de personas específico a las que se proveen servicios. El MOHO brinda una amplia variedad de recursos (instrumentos de evaluación, ejemplos de ca sos, protocolos de intervención y programas) que ayu dan a los terapeutas a crear esta conexión. Además, en el desarrollo del MOHO se ha puesto un fuerte énfasis en asegurarse de que esté basado en situaciones reales de la práctica diaria (Forsyth y cols., 2005; Kielhofner, 2005b). Por tanto, este modelo ha enfatizado firme mente la inclusión de los profesionales y las personas en los esfuerzos de investigación y desarrollo, con el objetivo de garantizar que los recursos se basen en la práctica y sean relevantes para quienes reciben los ser vicios. Centrado en la ocupación A diferencia de los modelos e intervenciones centrados en los déficits, que se enfocan en corregir un conjunto de síntomas o impedimentos, el MOHO fue el pri mero de los modelos contemporáneos en centrarse en la ocupación. En la práctica, esto significa que el pro fesional hace un esfuerzo deliberado por comprender
a la persona en cuanto a sus intereses, hábitos diarios y desempeño en ocupaciones específicas. En lugar de en focarse exclusivamente en analizar la biomecánica del movimiento de la persona en un ambiente médico o en realizar una evaluación cognitiva estandarizada pa- ra determinar el nivel de función cerebral, un tera peuta que utiliza el MOHO examina la participación de la persona en actividades significativas. En resu men, el MOHO aborda tres temas prácticos relaciona dos con este enfoque: • ¿De qué modo se motiva la ocupación, se orga niza en patrones de vida y se desempeña en el contexto del ambiente? • ¿Qué sucede cuando surgen impedimentos, en fermedades u otros factores que crean problemas ocupacionales? • ¿De qué modo la terapia ocupacional facilita la participación en ocupaciones que proveen sig nificado y satisfacción y que apoyan el bienestar físico y emocional de las personas? ¿QUÉ ES LA OCUPACIÓN? Según Kielhofner (2008), el MOHO se desarrolló es pecíficamente para centrar sus conceptos teóricos, la aplicación práctica y los esfuerzos de investigación en el hacer de la ocupación. La ocupación humana se re fiere al hacer del trabajo , el juego o las actividades de la vida diaria dentro de un contexto temporal, físico y sociocultural que caracteriza gran parte de la vida hu mana. Los seres humanos se definen por una intensa necesidad de hacer cosas (Fidler y Fidler, 1983; Nel son, 1988). La ocupación humana abarca tres grandes áreas de actividad: actividades de la vida diaria, juego y productividad. Las actividades de la vida diaria son las tareas típicas necesarias para el autocuidado y el automantenimiento, como asearse, bañarse, co mer, limpiar la casa y hacer la colada. El juego incluye actividades que se realizan libremente por el simple hecho de hacerlas, como explorar, pretender, celebrar, participar en juegos o deportes y dedicarse a aficiones (Reilly, 1974). La productividad abarca actividades, remuneradas o no, que proveen servicios o bienes a otros, tales como ideas, conocimientos, ayuda, inter- cambio de información, entretenimiento, objetos uti litarios o artísticos, y protección (Shannon, 1970). Ac tividades como el estudio, la práctica y el aprendizaje mejoran las capacidades para el desempeño produc tivo. Por tanto, la productividad incluye las activida des realizadas como estudiante, empleado, voluntario, padre o madre, aficionado comprometido o simple aficionado. Centrado en la persona En términos del MOHO, ser un profesional centrado en la persona consiste en que el terapeuta observe y,
Copyright © 2025 Wolters Kluwer, Inc. Unauthorized reproduction of the content is prohibited.
Made with FlippingBook - Share PDF online