Williamson. Ejercicios para poblaciones especiales

176 PARTE III ■ EJERCICIO Y NUTRICIÓN EN LA ENFERMEDAD

Síndrome metabólico

De acuerdo con la American Heart Association, el sín- drome metabólico ha aumentado en EE.UU. y ahora afecta a más del 23% de los adultos estadounidenses. Puede detectarse por un grupo de síntomas que aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares y diabetes. Estos síntomas son los siguientes: Grasa intraabdominal: • Hombres con una circunferencia de cintura ≥ 102 cm. • Mujeres con una circunferencia de cintura ≥ 88 cm. Triglicéridos elevados: • Nivel de triglicéridos séricos ≥ 150 mg/dl. Bajo nivel de HDL: • Hombres con un nivel de HDL < 40 mg/dl. • Mujeres con un nivel de HDL < 50 mg/dl. Hipertensión: • Presión arterial ≥ 130/85 mm Hg en más de tres lectu- ras consecutivas. Resistencia a la insulina o intolerancia a la glucosa: • Detectada por glucosa sérica elevada en ayunas ≥ 100 mg/dl. Una persona es diagnosticada con síndrome metabó- lico si hay tres o más de estos síntomas. La obesidad intraabdominal y la inactividad física parecen ser los predictores más fuertes para el síndrome metabólico. De acuerdo con el American College of Sports Medicine (ACSM) y el National Cholesterol Education Program, las intervenciones deben centrarse en el control de peso, la actividad física y el tratamiento de los factores de riesgo para las enfermedades cardiovasculares coexistentes 20,22 . Los mejores métodos para tratar el síndrome metabólico son la pérdida de peso del 5-10% en 1 año, el aumento de la actividad física de intensidad moderada durante un mínimo de 30 min o más al día la mayoría de los días de la

semana y reducir la ingesta de grasas saturadas y carbohi- dratos simples mientras se aumentan las proteínas magras. Cuando se trabaja con personas diagnosticadas con síndrome metabólico, la estrati cación del riesgo se basa en la presencia de dislipidemia, hipertensión e hipergluce- mia. Si está indicado, hay que solicitar un examen médico antes de iniciar la prueba de ejercicio. Debido a que muchas personas con síndrome metabólico también tienen sobre- peso u obesidad, hay que seguir las guías generales que se ofrecen en este capítulo para la población con sobrepeso. Además, controlar estrictamente la presión arterial antes de y durante el ejercicio, ya que la mayoría de las personas con obesidad y sobrepeso tienen hipertensión 20 . En general, las guías de prescripción de ejercicio para esta población son similares a las de la población general. Se deben considerar todos los factores de riesgo cardio- vascular y ajustar las recomendaciones en consecuencia (v. cap. 7 para obtener más información sobre las guías de ejercicio para personas con enfermedad cardiovascular). Aquellos con síndrome metabólico no necesitan pruebas de ejercicio antes de comenzar un programa de ejerci- cios de intensidad baja a moderada; sin embargo, suelen estar en baja condición física y necesitan comenzar lenta- mente. Al inicio, el ejercicio debe ser de intensidad mode- rada (40-59% VO 2R ) con una progresión gradual a una intensidad más enérgica (60-75% VO 2R ). Debido a que muchas personas que sufren síndrome metabólico tienen sobrepeso, deberían esforzarse por perderlo aumentando lentamente la duración del ejercicio 150-300 min por semana o 50-60 min de actividad 5 días a la semana. El ejercicio puede ser continuo o separarse en varias partes de 10 min de ejercicio diario si fuera necesario. Algunas investigaciones sugieren que las personas en reali- dad tienen que hacer ejercicio durante 60-90 min por día para perder peso y luego mantenerlo 20 . Añadir resistencia al entrenamiento puede promover aún más la pérdida de peso y debe hacerse al menos 2 días a la semana.

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