Williamson. Ejercicios para poblaciones especiales

174 PARTE III ■ EJERCICIO Y NUTRICIÓN EN LA ENFERMEDAD

La distribución de la grasa corporal es en realidad un predictor más fácil e igual de fiable para el riesgo de enfermedad crónica. La grasa intraabdominal, que rodea los órganos dentro de la cavi- dad abdominal, aumenta el riesgo de enfermedad cardíaca, accidente cerebrovascular, hipertensión, diabetes y muchas otras enfermedades crónicas en comparación con la grasa corporal inferior. La grasa en la parte inferior del cuerpo, o la grasa almacenada principalmente alrededor de las caderas y los muslos, no parece aumentar el riesgo de enfermedades crónicas. En consecuencia, los hombres, que suelen almacenar grasa intraabdominal adicional, tienen mayor riesgo de episodios cardiovascu- lares que las mujeres, que tienden a almacenar grasa en las caderas y los muslos. BENEFICIOS DEL EJERCICIO Aunque el ejercicio impone algunos riesgos, mejora la salud de esta población especial de varias maneras. La siguiente sección analiza algunos de los beneficios específicos que experimentan las per- sonas con sobrepeso y obesidad que hacen ejercicio. MEJORA DEL FUNCIONAMIENTO CARDIOVASCULAR Y RESPIRATORIO Los estudios confirman una correlación negativa entre el nivel de actividad y el riesgo de enfermedad cardiovascular. De acuerdo con el estudio NHANES I (National Health and Nutrition Examination Survey I), las personas obesas sedentarias tienen un riesgo de muerte cardiovascular tres veces mayor que las personas activas con peso saludable 1,17 . Además, las tasas de mortalidad cardiovascular entre las mujeres se correlacionaron positivamente con el IMC en el Nurses Health Study 17,18 . En otras palabras, las mujeres en este estudio experimentaron más episodios cardíacos a medida que aumentaba el IMC. El ejercicio mejora el riesgo cardiovascular, pues reduce la presión arterial, aumenta los niveles de HDL, disminuye los niveles de LDL y triglicéridos, y mejora el funcionamiento del corazón y los pul- mones, incluso sin perder peso 7,17,19 . Dado que el exceso de peso es un factor de riesgo independiente para las enfermedades cardiovasculares, cualquier pérdida de peso que acompañe al aumento de la actividad también disminuye de forma drástica el riesgo. De hecho, una pérdida de peso corporal del 5-10% mejora significativamente la presión arterial, los lípidos séricos y la tolerancia a la glucosa 20 . El funcionamiento pulmonar suele mejorar cuando disminuye la grasa abdominal. Los pulmones, cuyas acciones se inhiben por el exceso de grasa corporal, pueden inflarse por completo al perder peso, por lo que la frecuencia y la profundidad respiratorias vuelven a la normalidad. Además, la absorción máxima de oxígeno también mejora. DISMINUCIÓN DEL RIESGO DE DIABETES TIPO 2 Las personas con sobrepeso y obesidad tienen mayor riesgo de desarrollar resistencia a la insulina, aunque los niveles suelen estar en el rango normal a alto. La resistencia a la insulina produce un

Un método fácil y económico para evaluar el riesgo de enfermedad crónica del sujeto es medir la circunferencia de la cintura. Considerando que el riesgo de desarrollar enfermedades cardíacas, accidente cerebrovascular y dia- betes aumenta en aquellos con obesidad central, la circun- ferencia de la cintura es un indicador válido. En general, el Determinación del riesgo de enfermedad crónica SAMPLE riesgo de enfermedades crónicas aumenta de la siguiente manera: Hombres con una circunferencia de cintura mayor a 102 cm. Mujeres con una circunferencia de cintura mayor a 88 cm.