Klabunde. Fisiología cardiovascular_3ed

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FISIOLOGÍA CARDIOVASCULAR. FUNDAMENTOS

Adventicia Colágeno Fibroblastos Vasos vasculares (vasa vasorum) Nervios

Media Músculo liso Colágeno Elastina

Luz

Íntima Endotelio

■ Figura 2-7. Componentes de un vaso sanguíneo. Los vasos sanguíneos, excepto los capilares y las vénulas pos- capilares de pequeño tamaño, están integradas por tres capas: íntima, media y adventicia. Los capilares y las vénu- las poscapilares de pequeño tamaño carecen de media y adventicia. Se muestran los componentes principales de cada capa.

Células de músculo liso vascular ESTRUCTURA CELULAR DEL MÚSCULO LISO VASCULAR De manera característica, las células de músculo liso vascular miden de 5 µm a 10 µm de diámetro y varían entre 50 µm y 300 µm en longitud. Nume- rosas y pequeñas invaginaciones ( caveolas ) ubi- cadas en la membrana celular aumentan de forma significativa el área de superficie de la célula (fig. 2-8). El retículo sarcoplásmico muestra un desarro- llo deficiente, en comparación con el de los car- diomiocitos. Cuentan con proteínas contráctiles (actina y miosina); sin embargo, en el músculo liso estas no están organizadas en bandas diferencia- das de unidades repetitivas como lo hacen en el músculo cardíaco y el esquelético. En vez de ello, existen bandas de filamentos de actina unidos entre sí y anclados por cuerpos densos en el inte- rior de la célula, o bandas densas sobre la super- ficie interna del sarcolema, que actúan como las líneas Z en los cardiomiocitos. Cada filamento de miosina está rodeado por varios filamentos de actina. Así como los cardiomiocitos, las células del músculo liso vascular tienen una conexión eléctrica por medio de uniones comunicantes. Estas cone- xiones intercelulares de baja resistencia permiten la propagación de respuestas en todo lo largo de los vasos sanguíneos. Por ejemplo, la despolarización eléctrica y la contracción en un sitio localizado de una arteriola son capaces de inducir la despolariza-

músculo liso alojadas en una matriz de colágeno, elastina y varias glucoproteínas. Con base en el tamaño del vaso sanguíneo, pueden existir varias capas de células de músculo liso, algunas dispues- tas en sentido circunferencial y otras en sentido helicoidal, siguiendo el eje longitudinal del vaso. Las células de músculo liso están organizadas de tal modo que su contracción disminuye el diáme- tro del vaso. La proporción entre músculo liso, colágeno y elastina, cada una de las cuales tiene distintas propiedades elásticas, determina las pro- piedades mecánicas generales del vaso. Por ejem- plo, la aorta tiene una gran cantidad de elastina, que le permite una expansión y una contracción pasivas a la vez que la sangre entra en esta por el bombeo del corazón. Este mecanismo permite a la aorta reducir la presión arterial de pulso ( v. cap. 5). En contraste, arterias de menor tamaño y arteriolas tienen una cantidad, más bien, elevada de músculo liso, necesario para que estos vasos se contraigan y regulen así la presión arterial y el flujo de san- gre en los órganos. La capa más externa, o adventi- cia, está separada de la media por la lámina elástica externa. La adventicia contiene colágeno, fibro- blastos, vasos sanguíneos (los vasos vasculares [ vasa vasorum ] identificados en los vasos de mayor tamaño), vasos linfáticos y nervios autónomos, (sobre todo, simpáticos adrenérgicos). Los vasos sanguíneos más pequeños, los capilares, están inte- grados por células endoteliales y una lámina basal; carecen de músculo liso.

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