Kraemer. Fisiología del ejercercio_3ed

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Líquidos y electrólitos en el ejercicio

E C ESTUDIO DE CASO

ESCENARIO Es el entrenador de atletismo de un equipo de fútbol americano uni- versitario estadunidense. Es agosto y su equipo se está preparando para comenzar las prácticas de pretemporada, que incluirán dos sesiones por día. El clima caluroso de agosto, especialmente en el sur, donde se encuentra su escuela, es una preocupación durante estos dos agotado- res días de pretemporada porque puede esperarse que los jugadores suden mucho. Sabe que la deshidratación limitará su rendimiento y, lo que es más grave, amenazará su salud y bienestar. ¿Qué puede hacer para protegerse frente a la deshidratación? Opciones Primero, debe tener en cuenta que el mecanismo de la sed es ineficaz, especialmente en condiciones de calor y humedad. Sus jugadores sen- tirán la necesidad de beber solo después de experimentar cierto grado de deshidratación. Además, incluso cuando comiencen a beber, los de- portistas no podrán reponer los líquidos tan rápidamente como los pierden mientras sudan profusamente. Además, hay un lapso entre el momento en que se consumen los líquidos y el momento en que real- mente se absorben en la circulación sanguínea desde el tubo digestivo. Por tanto, es importante que sus jugadores beban líquidos antes de que comience la práctica, incluso si no sienten la necesidad de beber. Deben tomarse descansos regulares durante la práctica para permitir que se consuman los líquidos de reemplazo, y debe asegurarse de que todos los jugadores beban líquidos. Los líquidos deben mantenerse a una temperatura fría, ya que esto mejorará la palatabilidad y la velocidad a la que se absorberán en la circulación sanguínea. Beber agua durante la práctica debe ser obligatorio y no debe verse como un signo de debili- dad. Después de la práctica, los jugadores deben seguir bebiendo líqui- dos de reemplazo, teniendo en cuenta que necesitan ingerirse entre un 125% y un 150% más de líquido de lo perdido, calculado por la pérdida de masa corporal. Para asegurarse de que estén adecuadamente hidra- tados, puede optar por no permitir que los jugadores salgan del vesti- dor hasta que puedan demostrar que están bien hidratados. Esto puede comprobarse fácilmente pidiendo a los jugadores que proporcionen muestras de orina. El color de la orina puede combinarse con una tabla codificada por colores para determinar si los jugadores están euhidrata- dos (la orina debe ser de un color claro). Solo después de confirmar esto debe permitirse a los jugadores abandonar las instalaciones de práctica. ESCENARIO Se ofrece como voluntario en una carrera de maratón local en un día cálido de verano, pero con una humedad relativamente baja. Nota a un

corredor acercándose a la línea de meta con un paso tambaleante. Tam- bién se ve aturdido y confundido, pero sigue sudando. Cuando cruza la línea de meta, lo lleva rápidamente a un puesto de asistencia médica. Le toma la temperatura y observa que está ligeramente elevada. Cuando le ofrece un vaso con agua, le dice que solo tiene un poco de sed y dice que bebió agua en cada estación a lo largo del circuito de carreras. Le pide que se suba a una báscula y descubre que en realidad ha ganado un poco de peso mientras completaba la carrera. Preguntas 1. ¿El deportista sufre deshidratación? 2. ¿Qué debe hacerse para tratarlo eficazmente? Opciones En lugar de sufrir deshidratación, supone que este corredor en realidad está experimentando lo contrario, una situación denominada hiponatre- mia asociada al ejercicio (HAE). Sospecha esto porque las condiciones climáticas no son particularmente adversas y su temperatura no es dema- siado alta. El corredor también dice que no tiene mucha sed, lo que sugiere que está bien hidratado. El hecho de que haya ganado masa corporal es altamente sugestivo de que durante la carrera bebió más líquidos de los que perdió por la sudoración. Dado esto, cree que el corredor está sufriendo HAE, en lugar de deshidratación, lo que significa que bebió demasiada agua durante la carrera. Ha escuchado, de manera anecdótica, de que en los maratones hay una frecuencia de HAE mayor de lo que se cree en actividades de resistencia prolongadas. Aunque muchas personas han oído hablar de la deshidratación y la temen, usted sabe que el estado de hiponatremia, o una concentración de sal dema- siado baja, es también un grave peligro para la salud. El edema cere- bral que causa los síntomas mostrados por este deportista en particular, por ejemplo, marcha tambaleante y confusión, podría causar daños más graves como coma, e incluso la muerte, si no se trata. Por su reciente aparición (últimas horas), este caso se considera agudo y de intensidad moderada. En este punto, el tratamiento más eficaz es inyectar por vía intravenosa 100 mL de una solución hipertónica (3%) de NaCl y repetir esto cada 10 min hasta que los síntomas remitan y la sangre del depor- tista vuelva a los niveles isotónicos normales de sodio, es decir, 135-145 mmol·L −1 . Dado que está trabajando en una estación de apoyo sin equipo clí- nico para evaluar directamente la tonicidad de la sangre, periódicamente obtiene una muestra de orina del corredor y compara su color con una tabla de colores que muestra el color normal (isotónico) de la orina. Cuando la orina del corredor alcanza el mismo color que el que muestra la tabla como orina normal, isotónica, le dice que puede salir del puesto de asistencia.

RESUMEN DEL CAPÍTULO Los líquidos, incluidos el agua y los electrólitos, son necesarios para muchas funciones corporales. El agua es la sustancia más abun- dante en el cuerpo, constituye el 60% de la masa corporal de un adulto, y una persona no sobreviviría ni siquiera algunos días sin una ingesta su ciente de agua. El balance hídrico para mantener la euhidratación depende de la reposición del agua perdida a través del sudor, las heces, la orina y la transpiración insensible. Los líquidos corporales y las células contienen electrólitos, que son sustancias que se disocian en el agua para producir iones car- gados. Los electrólitos son necesarios para muchas funciones cor- Los electrólitos se pierden en el sudor y la orina, pero el equili- brio electrolítico se mantiene por medio de aumentos y disminucio- nes, según sea necesario, de la absorción de electrólitos por el tubo digestivo y el contenido de electrólitos urinarios. El mecanismo de la sed se activa con la pérdida de agua corporal, pero cuando se activa, ya se ha producido una deshidratación parcial (~2%). Ade- más, el mecanismo de la sed humana no restaura rápidamente la euhidratación. SAMPLE porales, pero también son importantes porque las células controlan el movimiento del agua mediante el control del movimiento de los electrólitos a través de sus membranas. Además, la presión osmótica creada por los electrólitos retiene el agua en las células y los espa- cios extracelulares.